Con las conclusiones del informe realizado por More in Common que refleja la opinión de un universo de españoles en torno a una variedad de cuestiones, entre ellas las que se incluyeron el nivel de ‘polarización’ política que en que se halla sumergido el país tanto como la evidente ‘división’ en el seno de la población, el grado de relevancia que se le otorga a la lucha contra el cambio climático o en qué medida favorece integrar la Unión Europea, el ex Presidente e histórico referente del PSOE, Felipe González, dijo que al margen de las confrontaciones a las que juzgó “natural” en el plano de la política; consideró que “la gente estaría deseando que el PSOE y el PP se pongan de acuerdo” en temas que se vinculan a sus preocupaciones como por ejemplo la falta de vivienda; responsabilizó de la falta de esos consensos “a los dirigentes políticos” que “no lo saben o no quieren aceptar” esa actitud que experimenta la población “porque están más por esa confrontación”, tras lo cual sostuvo que “España tendrá menos dificultades cuando se den cuenta que no pueden depender de los que tiran de un extremo o de otro extremo para impedirlo” y advirtió que “el extremo más preocupante sin duda es VOX”.
La intervención del ex Presidente español se convirtió en la más esperada durante el seminario online convocado por Kava – Grupo de reflexión de la Fundación Felipe González- en el que el Luis Aguado, coordinador del trabajo que desarrolló More in Common -organización internacional dedicada a luchar contra la polarización y la fractura social que desde el 2017 trabajo en el Reino Unido, Estados Unidos, Alemania, Polonia y España- titulado ‘Rumbo a las elecciones europeas de 2024’, abordó la percepción de los españoles que fueron consultados acerca de un amplio abanico de cuestiones. Del encuentro, que fue moderado por Rocío Martínez Sampere, directora de la Fundación Felipe González, también participó Áurea Moltó, directora de REDElcano en el Real Instituto Elcano.
Al margen de la cuestión central convocante del encuentro Aguado describió los continuos trabajos que viene realizando More in Common. “Ahora estamos haciendo un trabajo cualitativo y hemos preguntado sobre Javier Milei, qué opinión tiene la gente sobre Javier Milei y vemos que, incluso, genera bastante rechazo entre votantes del Partido Popular e incluso de VOX, lo que es curioso”, juzgó.
Al describir los resultados del estudio, Aguado, mostró una primera placa que reflejó que el 68% de los españoles que fueron consultados juzga que en España existe una ‘división’ y que esa percepción se ha incrementado respecto de la que reflejaba un idéntico estudio en el 2021 y se evidencia además que entre los votantes de VOX está el mayor porcentaje de aquellos españoles que juzgan que la profundidad de las diferencias que padece la sociedad alejan la posibilidad de lograr cierto grado de unidad y, al mismo tiempo, un grupo de la franja social entre los 25 y 39 años se muestra desconfiado del sistema democrático por no haber visto en satisfechas sus expectativas en los últimos años. En tanto, el trabajo aporta como otro dato es que un 44% con confiaría en la “integridad”, apunto, del sistema electoral imperante en el país y VOX aparece como la fuerza que tracciona mayoritariamente esa posición.
El trabajo pone de relieve en los primeros planos de preocupación de los españoles a la sequía casi al mismo tiempo la que despierta la inflación, la atención de lo que se presenta como la ‘sanidad’, lo que implica la atención de la salud, aunque también otra de las cuestiones se relaciona con el tema de la ‘inmigración’ y los ‘refugiados’. Con todos los españoles ha puesto la mira en lo que se refiere a la lucha contra el cambio climático, en tanto también se observa que aún existe mayoría entre los que visualizan la conveniencia de que España integre la Unión Europea y es entre los votantes de VOX donde aparece una posición negativa. En tanto, el cambio climático se ubicó en entre los temas de “preocupación” y, en ese marco, de “gran consenso” respecto a que debe ser incluido en las políticas públicas. En contraposición se refleja que “entre los votantes de VOX el cambio climático no existe”, detalló Aguado.
Tras algunas reflexiones de Moltó y a instancias de Martínez Sampere fue el momento de la intervención del ex Presidente e icónico referente del PSOE, Felipe González, no dudo en iniciar su exposición. “La política se está haciendo más distanciada del paisaje y del paisanaje lo cual se aproxima mucho a cuál es la reacción de los agricultores ganaderos que tienen una situación delicada. Es un grupo que es muy minoritario, desde el punto de vista del porcentaje de la población”, pero la situación refleja que los funcionarios “diseñamos políticas de oficinas que no conocen el paisaje ni el paisanaje; no lo identifican o lo desconocen y no hacen políticas que lleguen a la última milla e, incluso, utilizan un lenguaje inexplicable para esos sectores de la población por tanto hay una comunicación que no está dirigida a ese sector de la población que sufre ¡y sufre de verdad!”.
En el tramo inicial de su exposición, González, habló de las “contradicciones internas” y recordó que hizo “algunas propuestas” que le fueron encomendadas desde la Unión Europea y comentó que “una de las cosas que proponía era que se preocuparan del lenguaje de comunicación de las élites europeas y hablo del Consejo e incluso del Parlamento; hablo de las reuniones del Consejo que realmente eran larguísimas, la mitad de la literatura de las reuniones, era para expresar estados de ánimo que no se conocían; ‘la Unión Europea muestra su preocupación…’, ‘la Unión Europea expresa su grave preocupación….’, o su ‘satisfacción….,; ‘su gran satisfacción….’ Pero ¿dígame lo qué piensa hacer?, pues no me diga que está preocupado. ‘si está preocupado vaya tómese una copa y venga después que se le pase la preocupación’”, graficó González, quien remarcó que “hay un distanciamiento sin duda, incluso, entre los temas entre los que la gente tiene preocupación”.
“¿Por qué la gente tiene gran preocupación por el cambio climático? Primero porque es una realidad más allá de cómo se lo presente, con muy poco negacionismo, es una realidad dramática que nos afecta a nuestras vidas. Y tiene preocupación también porque cuando se explican las políticas de lucha contra el cambio climático, que es uno de los problemas más difíciles para expresarnos con claridad y que la gente sepa para llevarle tranquilidad, uno se encuentra con el siguiente fenómeno: Los ‘pesimistas ganan fama’ y los ‘optimistas dinero’ en esta situación; los pesimistas, los que hacen informes catastróficos sobre la situación no sólo porque creen (porque) no es que no crean (sino) que creen en el cambio climático y hacen un informe catastrófico o un libro catastrófico tienen muchas más fama que aquellos que dicen ‘oiga, se pueden hacer cosas, que se puede trabajar’ pero comunicando con la gente”, juzgó el ex Presidente español.
En otro pasaje de su exposición, el ex Presidente González, admitió estar “sorprendido” y que le llama su atención “que hay un tramo de edad que se ha colocado más en la posición de rechazo o de negacionismo o de tensión que va desde los 24 años”, describió respecto de la pertenencia de España a la UE, pero defendió los avances que alcanzó su país desde su incorporación a la Unión Europea, quien -dijo- “la Unión Europea se equivocó con la crisis del 2008 al 2010 en la respuesta; aplicó una política totalmente de austeridad que agravo la situación de todos que destruyó una inmensa cantidad de expectativas y a esa generación que vienen de allí se le cortaron una multitud de expectativas”
“También me interesa destacar muchos temas que están implícitos y explícitos en el informe. La gente está preocupada por la sequía; se preocupa si llueve pero después se olvida e incluso los dirigentes políticos ‘dicen, bueno ya nos libramos’ ¿Cómo que nos la libramos?”, alertó González, quien cuestionó: ”Hay un problema de cambio climático serio y los recursos hídricos son muy escasos. Eso de verdad no se analiza en serio”, remarcó.
El ex Presidente español, ya en el tramo final de su extensa disertación, advirtió que con lo que “nos estamos encontrando es (con) el deseo de los ciudadanos sea que la Unión Europea juegue un papel en el mundo geopolítico y que se pongan de acuerdo. Eso en España lo encontramos especialmente. Las votaciones reiteradamente y los estudios lo confirman que la gente le pide al PSDO y al PP que se pongan de acuerdo en temas básicos, que creen un espacio de centralidad que nos permita responder a los excesos por una y otra parte; excesos se producen mucho más en la polarización que genera VOX, que es el típico populismo que da una respuesta simple a un problema complejo, pero siempre tiene la precaución de buscar un culpable. Si no funciona la respuesta hay un culpable. Son antiinmigración pero no hay una sola familia de estos que votan a VOX que no tenga alguna inmigrante o un inmigrante que atienda a las personas mayores de su familia o varios. Por tanto, niegan la evidencia de lo que usan”, azuzó González a los partidarios de ese espacio de extrema-derecha.
Sostuvo más adelante que “la distancia en temas sustanciales como los que hemos analizado entre PSOE y Partido Popular es mucho menor que entre la distancia entre Partido Popular y VOX o la distancia entre Partido Socialista y sus socios de gobierno y cuando hablo de sus ‘socios’ de gobierno hablo de sus aliados; todos tenemos bastante claro la agresión a Ucrania de (Vladimir) Putín y la necesidad de ayudar a Ucrania para que se defienda de esa agresión, salvo los miembros de la coalición de gobierno que creen que no hay que liberar ni emplear más pero además tenemos la contradicción de que estamos en contra del renacimiento de los nacionalismos en Europa pero aquí sí tenemos como aliados a los nacionalismos internos” y volvió a poner en escena el rol de la UE. “La Unión Europea puede jugar un papel internacional con esta reaparición de nacionalismos que algunos son ridículos. ¿Nosotros vamos a hacer un papel internacional tratando, digamos, de normativizar lo que hacen otros porque nosotros no somos capaces de hacerlo?”, planteó. Y prosiguió: “Todavía en la Unión Europa, hay país a país, que de verdad creemos en los ‘campeones nacionales’ y, si es a nivel interno de cada país, ya creemos en los ‘campeones nacionalistas’. Necesitamos que la UE procure tener campeones europeos que compitan en el mundo con el que nos relacionamos, si es que realmente quiere hacer un papel relevante a nivel internacional”.