martes 21 de mayo de 2024
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Universidades en lucha

Tanto en la Argentina como en los EE.UU. las Universidades tienen algo que decir en momentos en que la derecha conservadora despliega una ola de violencia y ataque a la ciencia sin precedentes en la historia moderna.

Antivacunas, teorías conspirativas, terraplanistas y enemigos abiertos de la ciencia en general han poblado los medios de comunicación y las redes sociales, sobre todo durante la pandemia de Covid 19, generando una masa crítica de ciudadanos que, en su mayoría, apoyan a líderes mesiánicos que explotan estas circunstancias para proponer un cambio hacia un conservadurismo extremo.

Mientras que en la Argentina la masiva marcha de la semana pasada fue una reacción a un ataque a “lo público” por parte del gobierno libertario conservador, en los EE.UU. los estudiantes y docentes están protestando por el apoyo irrestricto de la Casa Blanca al gobierno Conservador religioso de Israel que está causando una masacre de civiles en la Franja de Gaza.

Nemat “Minouche” Shafik, la reciente primera mujer presidente de la Universidad de Columbia, hizo arrestar a más de cien estudiantes, por la policía de la ciudad de Nueva York y ficharlos por invasión de propiedad privada en su propio campus, permitiendo algo que las universidades siempre han evitado: que haya agentes del orden violando la autonomía universitaria.

Tanto alumnos como profesores consideran el campus como su jurisdicción y se han quejado de que la administración de Columbia no los consultó antes de ordenar los arrestos. Este episodio grave, originado en el apoyo que los estudiantes han dado a Palestina, cuestionando incluso el financiamiento de Columbia a desarrollos militares, recuerda a las luchas de los ’60 desatadas por la guerra de Vietnam. La represión policial no funcionó en Berkeley en 1964, en Columbia en 1968, en Harvard en 1969 o en Kent State en 1970, sólo profundizó el conflicto.

El pasado 24 de abril, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano por Louisiana Mike Johnson, que inicialmente apoyó a Shafik, retrocedió y dijo que la presidenta debería dimitir si no puede controlar la situación. La junta directiva de Columbia dijo, en un comunicado, apoyar “firmemente a la presidenta Shafik mientras dirige la universidad en este momento extraordinariamente desafiante”. Sin embrago, el Consejo Superior de Columbia adoptó una resolución, por 62 votos a favor, 14 en contra y tres abstenciones, que exige una investigación sobre la dirección de la universidad. También acusa a la administración de violar los protocolos establecidos, socavar la libertad académica, poner en peligro la libre investigación y violar los derechos al debido proceso tanto de estudiantes como de profesores.

Las protestas se han extendido a otras Universidades de varios estados –incluso en Canadá y Europa–, abriendo el debate de cómo desalojar los campamentos a medida que se acercan las ceremonias de graduación. Decenas de personas fueron arrestadas el lunes durante protestas en universidades de Texas, Florida, Utah y Virginia.

En Cal Poly Humboldt, al norte de San Francisco, los estudiantes manifestantes se atrincheraron en un edificio que incluye la oficina del presidente, etiquetando las paredes y rebautizándolo como “Salón Intifada”. Los manifestantes arrestados suman 1000 en todo el territorio estadounidense.

En Manhatan, epicentro del conflicto, si bien la protesta es pro Palestina, los estudiantes judíos o pro israelíes han organizado una respuesta con tibias demostraciones de pocos estudiantes y mediante una demanda colectiva que alega un incumplimiento de contrato por parte de la universidad por no mantener un entorno de aprendizaje seguro, a pesar de las políticas y promesas. También cuestiona la suspensión de las clases presenciales – una de las primeras medidas tomadas – y busca una acción judicial rápida que exija a Columbia una vuelta a la normalidad.

Otro grupo legal representa a los estudiantes atrincherados propalestinos e insta a la oficina de derechos civiles del Departamento de Educación de Estados Unidos a investigar el cumplimiento por parte de Columbia de la Ley de Derechos Civiles de 1964 por cómo han sido tratados.

Doblando la apuesta del ultimátum de Shafik dirigido a los acampantes, que vencía el lunes 29 a las 14 horas, docenas de manifestantes tomaron este martes temprano un edificio administrativo en la Universidad de Columbia de la Ivy League en Manhattan, bloquearon las entradas y ondearon una bandera palestina por una ventana. La emisora de radio estudiantil WKCR-FM transmitió en vivo la toma.

La difícil situación de los estudiantes arrestados agrega más leña al fuego de las protestas, y los estudiantes y un número cada vez mayor de profesores exigen amnistía para que no queden registrados los cargos levantados contra ellos.

Howard W. French, columnista de Foreign Policy y, a la vez, profesor de la Universidad de Columbia sostiene que las escenas que ha visto en el campus revelan nada menos que “una crisis de la política en Estados Unidos”.

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