La disputa de unos terrenos tomados que concluyó con el fatídico resultado de cinco muertos y una decena de heridos, derivó en severos cuestionamientos de dirigentes de la UCR hacia el desentendimiento del gobernador Axel Kicillof.
El episodio penoso fue el resultado de una asamblea vecinal, con una reyerta entre grupos que serían de las comunidades paraguaya y boliviana en la localidad de González Catán, partido de La Matanza, donde actuó una banda delictiva dedicada a la usurpación y venta ilegal de terrenos.
A la actitud pasiva del Gobierno provincial, se le sumaron las declaraciones del ministro de Seguridad, Eduardo Javier Alonso, quien derivó la responsabilidad del conflicto a la Justicia: “Necesitamos que pueda ser más activa y tomar una medida con todo esto”.
“El fin de semana hubo muertos en una toma de terrenos en La Matanza. Hoy un chico de 16 años perdió la vida en un violento robo en Chascomús. Toda la provincia de Buenos Aires está atravesada por la violencia y la inseguridad. El gobernador Kicillof debe dejar de poner excusas”, sentenció la diputada nacional Karina Banfi.
También opinó la legisladora provincial Alejandra Lordén: “Anomia total en La Matanza. El Estado municipal y el provincial deben hacerse responsables de solucionar esto de raíz. La provincia de Buenos Aires necesita paz. Mi apoyo total a la Justicia para que esclarezca los hechos”.
Por su parte la presidente de la UCR Morón, Silvina Samparisi, consideró que “en la provincia de Kicillof y La Matanza de Espinoza, al igual que en el lejano oeste, las tierras se disputan a punta de pistola. Con un Estado ausente, las mafias son la Ley”.ki
