El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, asistió a la movilización convocada por la Confederación General del Trabajo (CGT) en rechazo a la Ley Ómnibus, al DNU y a las medidas económicas del Gobierno Nacional.
Esto fue motivo para que los cuestionamientos hacia su actitud cayeran sobre su figura, a pocas horas de haberse cometido uno de los hechos aberrantes en su jurisdicción, como fue el asesinato de la niña Umma, de tan solo 9 años de edad, en el partido de Lomas de Zamora. Y con el agravante de que Kicillof solo responsabilizó la Justicia, pero casi tres días después. Mientras tanto, se mantuvo en silencio.
“Como si en la Provincia no tuviera nada que solucionar, Kicillof acompañó hoy el paro contra el Gobierno Nacional”, dijo la diputada radical Anahí Bilbao, uno de los tantos exponentes que repudiaron su participación en el acto frente al Congreso Nacional. “Señor Gobernador, asesinaron a una niña inocente, 9 años, y usted no estuvo al lado de esa familia ni para dar la cara ni para dar su apoyo”, sentenció la legisladora.
También se manifestó Vanesa Zuccari: “Gobernador Kicillof, ¿usted se da el lujo de parar? Debería estar trabajando para garantizarnos a los bonaerenses seguridad (todos los días nos matan como a perros), mejor salud, educación y por supuesto un IOMA que funcione”.
Lordén y el paro de la CGT
Por su parte la diputada de Saladillo, Alejandra Lordén, criticó a la CGT que “despertó de su letargo”, y sostuvo que en la movilización se observó “el kirchnerismo amnésico marchando y el Gobierno queriendo imponer un pensamiento único, como si se las supieran todas”.
“Las extorsiones y las amenazas no sirven en un país que necesita del debate democrático como punta de lanza para salir de la decadencia”, sostuvo Lordén. “Nada de todo esto resuelve la diaria de nadie. Basta de patoteros. Acá hay que sentarse a discutir la mejor salida para una Argentina que no aguanta más”, aseveró la legisladora.
