El ex alcalde de Nueva York Rudy Giuliani deberá entregar el control de un lujoso apartamento de Nueva York, joyas y otros objetos de valor a dos trabajadores electorales de Georgia que buscan cobrar casi 146 millones.
Así lo determinó el juez que entendió en un caso de difamación contra el ex funcionario.
El año pasado, un jurado federal en Washington, DC, encontró que Giuliani, ex abogado personal de Donald Trump, había difamado a dos trabajadoras electorales, Ruby Freeman y su hija Wandrea “Shaye” Moss, al acusarlas falsamente de manipular votos en las elecciones de 2020, que Trump perdió ante el demócrata Joe Biden.
A Giuliani se le ordenó poner el control del apartamento de Manhattan, las cuentas de efectivo, los recuerdos deportivos, los relojes de alta gama y otros artículos en una administración judicial controlada por Freeman y Moss dentro de siete días, según una orden del juez de distrito estadounidense Lewis Liman.
“Estamos orgullosos de que nuestros clientes finalmente comenzarán a recibir parte de la compensación a la que tienen derecho por las acciones de Giuliani”, declaró Aaron Nathan, abogado de Freeman y Moss, en un comunicado, según la agencia de noticias Reuters.