El diputado radical aludió con esa advertencia a las implicancias del proyecto de ley que impulsa el gobierno para suspender las PASO y, en ese sentido, le reclamó al oficialismo que retiré la iniciativa incluida en el temario de sesiones extraordinarias.
“Ojo con hacer modificaciones coyunturales que después les salgan caras”, fue la advertencia que dirigió cara a cara a los ‘libertarios’ en el Congreso el diputado nacional del radicalismo, Fabio Quetglas, en medio de los intentos de La Libertad Avanza de buscar sancionar en la Cámara baja el proyecto de ley por el que cual el gobierno propicia suspender las PASO, luego de enrostrarles a los ‘libertarios’ la intención de poner alentarlo como una jugada política para sacar una ventaja coyuntural en las elecciones de este año y fue aún más allá cuando sin rodeos le reclamó al oficialismo que retire la iniciativa incluida por el Poder Ejecutivo en el temario de las sesiones extraordinarias a la que cuestionó por sus implicancias, entre las que incluyó, la irresponsabilidad que significa buscar cambiar la legislación electoral, precisamente, en el curso de este año en que se realizarán elecciones de renovación parlamentaria.
Durante el debate en un plenario conjunto de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto y Hacienda sobre el proyecto que impulsa La Libertad Avanza por el cual propicia la suspensión de las PASO, el legislador radical no vaciló en atribuirle a los ‘libertarios’ promover la iniciativa en razón de contar en el actual escenario político con un liderazgo excluyente de ese espacio que naturalmente recae, aunque no lo mencionó en el Presidente Javier Milei. Quetglas se dirigió expresamente a sus pares del oficialismo: “Poniéndome en los pies del Ejecutivo entiendo que esta modificación es lógica para ustedes porque es una modificación que le facilita mucho las cosas a los espacios políticos que tienen un liderazgo claro y excluyente”, y tras reflexionar que, por el contrario, “le dificulta mucho las cosas a los espacios políticos que están en un proceso de deliberación sobre su liderazgo político”, les advirtió: “es una ventaja coyuntural. Ustedes dentro de dos años podrían estar discutiendo eventualmente con el PRO el liderazgo político y no tener esta herramienta sería un problema. Ojo con hacer modificaciones coyunturales que después les salgan caro”, les advirtió.
En una extensa y profunda reflexión, Quetglas comenzó por plantear si la cuestión de suspender o eliminar las PASO era o no una cuestión de la llamada ‘agenda de la gente’ y sostuvo: “Es un término al cual no me quiero subir porque me parece que es un latiguillo que se usa para no hacerse cargo de los posicionamientos políticos”, tras lo cual lanzó la primera estocada verbal hacia los oficialistas cuando remarcó: “Es irresponsable cambiar la legislación electoral en el año en que se vota”.
Alentó analizar si la modificación a la legislación electoral que propone el oficialismo “es buena o mala en sí misma. Y el único argumento relativamente consistente que se plantea es el del costo; argumento que está muy diluido a partir de la sanción de ley de Boleta Única y que resulta inaceptable por quienes defienden el desdoblamiento electoral. Yo creo que la gente que desdobla para que sus gestiones sean evaluadas de conformidad, sin alteraciones de otros criterios, está en su derecho y también creo que están en su derecho aquellos que dicen ahorremos un mango y no vayamos a las PASO. Ahora los dos argumentos juntos no entran en el mismo balde”, graficó
El diputado Quetglas recordó que las PASO constituían un mecanismo de selección de candidatos y para recordar que se había utilizado en el último proceso electoral, lo que lo llevó a rememorar que “dicho sea de paso, es el mecanismo de selección de candidatos que le permitió al actual Presidente, casi sin partido, llegar al Ejecutivo nacional. Tan malo no debe ser”, ironizó. Advirtió que el mecanismo de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias tiene como fundamentos “la transparencia, la equidad, no alterar la representación y dar mínimas garantías de gobernabilidad. Revisé los sistemas comparados y, sobre todo, con el conocimiento que tuve por una cuestión generacional, con las internas cerradas” y entonces planteó: “Acá se habló de las internas cerradas. Eso sí que era casta; con un pequeño aparato (partidario) y un poquito de presupuesto público se garantiza que no te mueva nadie. Digo esto porque siguen con el argumento del agentismo y vamos a ir a un modelo de internas cerradas en una democracia que ya tiene enormes condiciones de degradación y de erosión de su representación política la proyección de esto hacia adelante puede ser terrorífica”.
“Derogar las PASO sin una reflexión o una propuesta de un mecanismo alternativo es un salto al vacío y decir que es suficiente una interna cerrada de los partidos políticos es como mínimo cínico”, sostuvo Quetglas, quien ahondó luego sobre la cuestión del financiamiento de la actividad política. “Y quiero ser claro: el financiamiento de la política nunca es un problema, recursos para financiar la política siempre habrá porque la política es la discusión del poder y en cualquier economía compleja las cadenas de valor, las empresas, las corporaciones tienen hasta razonables intereses para mediar su influencia con recursos”, sostuvo.
Y añadió: “lo que no tiene recursos es la representación política de las causas públicas nobles (como) la defensa del ambiente, que la población coma bien, el cuidado de la seguridad vial. Esa representación política no tiene financiamiento porque no constituye un negocio para nadie. En cambio, lo que constituye un negocio de alguien, de manera más o menos transparente algún tipo de financiamiento tiene, así que no se discute el financiamiento de la política sino que se discute el financiamiento ético de la política”.
Quetglas volvió a plantear: “La pregunta sería esta ¿por qué el cien por ciento de los países regulan el financiamiento de la actividad política? ¿Están todos equivocados? El riesgo no es que el poder económico influya en la política, eso ocurre y hasta en cierto nivel es lógico y en dosis homeopáticas puede ser bueno porque introduce la inter-temporalidad; el argumento de ustedes van a estar cuatro años yo voy a hacer una inversión que va a durar 30 años, preciso un diálogo para sostener esa inter-temporalidad. El riesgo es que se quede sin representación política el resto de la agenda pública y uno de los roles que tienen las instituciones democráticas es modelar las preferencias sociales; a quienes quedan sin representación los cambios sólo les queda la posibilidad de ser disruptivos, violentos, a institucionales. Nuestro Congreso, este Congreso está compuesto por empresarios, académicos activistas sociales, de ambiente, de género, estudiantiles, profesionales, liberales, sindicalistas, terratenientes, influencers, periodistas, artistas, políticos profesionales, rentistas, híbridos de un poco de todo esto. ¿Saben por qué? Porque eso es la sociedad argentina; la sociedad argentina tiene todo eso. Sin una regulación adecuada del financiamiento de la política, que no es bueno en la Argentina, todo tiende a empeorar.
Quizás alguno acá no le importe. A mí sí me importa”, enfatizó.
“Creo que está mal derogar un mecanismo que merece un juico justo”, graficó Quetglas, tras lo cual expresó: “Creo que está mal suspenderlo y creo que está mal modificarlo sin construir una alternativa razonable. No es prioritario; simplemente les conviene. Es así de sencillo. Pero déjenme decirles solo una cosa. Haciendo lo que creíamos que nos convenía, sin pensar mucho, muchos de los que estamos acá hemos erosionado a fuerzas políticas centenarias. No sigan ese camino de fracaso; este es un mal proyecto, retírenlo”, exigió Quetglas al concluir su contundente intervención.