Lejos de condenar que un efectivo de seguridad porte insignias políticas junto a su uniforme, el legislador libertario lo vanaglorió.
Uno de los efectivos de la Policía Federal que formaba parte de los grupos que custodiaron el Congreso de la Nación el miércoles durante la sesión para votar la ley ómnibus portaba, junto a su uniforme reglamentario, una insignia de una serpiente, típica de libertarios y anarcocapitalistas. El hombre fue captado por la prensa y al darse cuenta de que lo habían descubierto optó por intentar taparse el logo partidario.
Los miembros de las Fuerzas Armadas y de fuerzas policiales como la Policía Federal —que también colaboró con el resguardo del Congreso— no pueden tomar partido político, mucho menos cuando se encuentran en horas de trabajo. Su servicio lo deben a la Nación argentina y sus ciudadanos, independientemente de ideologías políticas, religiosas, o de cualquier otra índole.
Ramiro Marra, legislador porteño y excandidato a jefe de gobierno por La Libertad Avanza, lejos de condenar la irregularidad del gendarme, salió a congratularlo.
“Estamos del lado de la ley. Más claro, echale agua”, posteó Marra en X, junto a una fotografía con zoom en la serpiente.
Mientras se debatía la ley ómnibus en Diputados, afuera, en los alrededores del Congreso hubo disturbios y forcejeos entre agrupaciones políticas, la mayoría afines al Frente de Izquierda y organizaciones piqueteras.
Pasadas las 22 horas, cuando se dio un cuarto intermedio para continuar la sesión este jueves al mediodía, hubo cuatro mujeres que fueron detenidas, entre ellas Ivanna Bunge, militante de la Unión Cívica Radical. Se encontraban sentadas en la calle cantando el himno cuando fueron aprehendidas.
Alrededor de las 10 horas de este jueves Bunge y las otras tres chicas recuperaron su libertad, confirmó el partido.
“El oficialismo alienta un peligroso avance represivo sobre aquellos que piensan diferente y reclaman en forma pacífica”, agregó la UCR en X, con la etiqueta “Democracia para siempre”.
