La segunda parte de la entrevista a Liliana De Riz nos trae definiciones que clarifican aun más el fenómeno Milei:
“La pregunta que nos hacíamos era como iba a gobernar alguien que no tenía partido, no tenía equipos y no tenía peso territorial y en realidad el haber principal de Milei es el desconcierto de la oposición que los primeros seis meses estuvo como espectadora en el Congreso, en modo espera”.
“Milei tiene dotes personales para ubicarse en el centro de la escena, pero además tenés una oposición deshilachada, si contás con una sociedad harta de las vueltas, si le das la voz a los que no la tenían y a esto le sumas el federalismo fiscal que le da recursos extraordinarios para negociar con los gobernadores”.