La recaudación impositiva de 2023 del Estado Nacional alcanzó los $43 billones, lo que representa un alza de 115,1% con relación al año anterior pero se ubica por debajo de la inflación que apunta a trepar por encima del 190% en el período.
Esta diferencia explica la necesidad de la Administración central de recurrir a herramientas como la emisión monetaria para financiar el déficit público, lo cual luego retroalimenta la suba de precios.
Este crecimiento por debajo de la inflación también fue consecuencia de las últimas medidas que tomó el ex ministro de Economía, Sergio Massa, en medio de la campaña electoral.
El IVA neto recaudó $14.791.510 millones y tuvo una variación interanual de 153,7%. El IVA Impositivo (reflejo del consumo) aumentó 159,1%, en tanto que el IVA Aduanero se incrementó en 142,6%.
“Impactaron negativamente las prórrogas del vencimiento del impuesto por los períodos fiscales devengados agosto a noviembre, establecida para los sujetos adheridos al ´Acuerdo de precios para el mercado local´ y por los períodos fiscales devengados septiembre a noviembre para los trabajadores Autónomos”, admitió la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).
En un sentido similar se comportó el Impuesto a las Ganancias, por el cual el fisco obtuvo $8.7 billones, que representa un alza de 86,3% con relación a 2022.
Este tributo se vio impactado por la eliminación del gravamen para la cuarta categoría, decisión que además desfinanció a las provincias y hoy es un frente de conflicto entre el presidente Javier Milei y los gobernadores.
Otra fuente de ingresos fuertemente afectada por la coyuntura de 2023 fue el impuesto al cheque que sumó $1.5 billones, con una merma de 6,3% en comparación con el período previo.
En ese caso fue determinante el impacto de la sequía, los ingresos registrados en 2022 por la implementación del Programa de Incremento Exportador 1 y 2; y la disminución de los precios promedio de la mayoría de los productos de los complejos sojero y cerealero.
Producto de la menor actividad económica, el impuesto al cheque sumó $3.1 billones, que representa una mejora de 134,2% en forma interanual, también muy por debajo de la inflación.
A su vez, los ingresos de la seguridad social aumentaron 134,2% a $9.2 billones.
Dentro de este escenario, el único tributo con performance favorable fue el impuesto PAIS que sumó $ 1.5 billones, que significa un incremento de 335,5%.
Este aumento fue producto del aumento del tipo de cambio y de la ampliación del tributo a otros sectores económicos.