La internacional Socialista (IS) expresó su preocupación y condenó con firmeza a la reciente reforma de la Constitución en Nicaragua en cuyo marco se dispuso extender hasta el 2028 el mandato del Presidente, Daniel Ortega y la Vicepresidente, Rosario Murillo sin que mediara debate alguno en la Asamblea Nacional en ese país caribeño y juzgó que tal medida constituye un “grave retroceso democrático” tanto como la “consolidación del poder absoluto” que implican un debilitamiento de las instituciones de esa Nación.
Desde las redes sociales, el Comité para América Latina y el Caribe de la Internacional Socialista, hizo pública una declaración en la que manifestó su “profunda preocupación y firme condena ante la reciente reforma constitucional en Nicaragua, que extiende el mandado de Daniel Ortega y Rosario Murillo hasta el 2028” y manifestó que “esta medida, aprobada sin debate en la Asamblea Nacional, representa un grave retroceso democrático y una consolidación del poder absoluto debilitando aún más las ya frágiles instituciones del país”.
“La imposición de un modelo de copresidencia y la eliminación de contrapesos institucionales refuerzan un régimen autocrático, restringiendo derechos fundamentales y silenciando la voluntad del pueblo nicaragüense”, advirtió la Internacional Socialista en declaración en la que además expresó: “Instamos a la comunidad internacional a rechazar este atentado contra la democracia y a exigir garantías para la restauración del Estado de derecho en Nicaragua. Sólo el respeto a la institucionalidad y a los derechos humanos permitirá una salida pacífica y legítima a la crisis que enfrenta el país”.
