miércoles 1 de mayo de 2024
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España: La justicia admite querella contra la cúpula de Hamas

La Justicia española ha admitido una querella contra Hamás por terrorismo presentada por el padre de una joven hispano-israelí que fue asesinada en el ataque del grupo islamista a Israel.

En un auto publicado este martes, la jueza de la Audiencia Nacional española María Tardón admite a trámite la querella contra la cúpula de Hamás presentada por el padre de la joven Maya Villalobo Sinvany, asesinada en el ataque terrorista del pasado 7 de octubre.

La jueza admite la querella, como había solicitado la Fiscalía, y acuerda acumularla a las diligencias ya abiertas de oficio el pasado 11 de octubre para investigar la muerte de la joven y del ciudadano español Iván Illarramendi.

Antes de decidir sobre la imputación de los ocho miembros de la cúpula de Hamás que se citan en la querella y sobre una eventual orden de detención, esperará al resultado de la comisión rogatoria enviada a Israel en las diligencias ya abiertas.

En la comisión rogatoria dirigida a las autoridades de Israel, la jueza ha pedido que le remitan toda la información que hayan recabado sobre la autoría y reivindicación del ataque.

Según explica Tardón en su auto, el padre tiene la condición de agraviado por unos hechos para los que la jurisdicción española resulta competente, pero no se abre un nuevo procedimiento, sino que se acumula a la causa penal ya en marcha en la Audiencia.

Aunque asume que la autoría concreta de los dos asesinatos que investiga puede ser inviable, decidió agotar “todas las posibilidades de investigación” al considerar que el derecho a la información es uno de los más básicos de la víctima.

La joven, de 19 años y con doble nacionalidad española e israelí, se encontraba en el momento del ataque en la base de Nahal Oz, cerca de Gaza, haciendo el servicio militar.

Illarramendi fue asesinado junto a su mujer chilena en el kibutz Kissufim, a dos kilómetros de la Franja de Gaza.

El ataque de Hamás provocó más de 1.200 muertos y unos 250 rehenes fueron llevados al enclave palestino, tras lo que Israel declaró la guerra al grupo islamista y lanzó una ofensiva militar en la Franja con más de 33.000 muertos, la mayoría civiles, y más de 76.000 heridos. EFE

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