La intervención del Gobierno en Radio Televisión Argentina está a cargo del abogado del Grupo América, de Vila y Manzano, Diego Chaher.
El interventor tomó medidas muy cuestionadas cómo el levantamiento del programa Cocineros Argentinos, de muy buen rating en todo el país, ya que en el mismo se difundían
recetas gastronómicas de todas las regiones del Argentina. Otro programa que se levantó fue Mas de vos, un programa que llevaba unos meses, y que apuntaba a la adopción por parte de la comunidad de perros y gatos. El ciclo era auspiciado por la prestigiosa fundación mascotera Proyecto Cuatro Patas.
También se eliminaron los noticieros del fin de semana, incluido el noticiero internacional que se emitía en vivo los días sábados. No quedaron programas en vivo, y se emiten latas de programas ya vistos. Hay numerosas quejas que interpretan esto cómo un vaciamiento para liquidar el canal público y la Radio Nacional a un precio vil. Incluso algunos hablan de la posibilidad de la venta a empresarios inmobiliarios de los históricos inmuebles de Maipú 555 y Figueroa Alcorta y Tagle, además de las valiosas sedes de Radio Nacional que
suman 49 en todo el país. A esto además hay que sumarle los valiosos terrenos de las plantas transmisoras.
Se conocieron recientes nombramientos de funcionarios con sueldos millonarios, que estarán a cargo de la liquidación y reducción de personal. El principal es el de Eduardo
Gonzales, un ingeniero que cobrará más de 4 millones de pesos por diseñar un plan de reingeniería empresaria, consistente de retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas en
los medios públicos. Gonzales viene de trabajar en medios privados cómo América TV, Telefe, Canal 9 y otras empresas privadas donde se especializó en fusiones adquisiciones y
reducción de personal.
Pero lo que más llama la atención es que Gonzales para el ajuste en los medios públicos, estará rodeado por altos funcionarios kirchneristas que fueron designados por Rosario
Lufrano, algunos de los cuales han sido ascendidos en sus cargos y en sus sueldos. Funcionarios que responden al exministro de seguridad Aníbal Fernández, y una muy cercana al Instituto Patria, y a Víctor Hugo Morales.
Lo curioso de esta situación es que mientras el Gobierno afirma que los Medios Públicos han sido sobredimensionados y repletos de militantes kirchneristas en importantes cargos y
sueldos, recurre a ellos para la reducción de personal.
Los gerente y subgerente que fueron ascendidos son Mario Fernando Viera y Paola Vanessa Canale. Pasarán a percibir un sueldo de mas de 3.500.000 pesos como. Ambos designados
por la periodista kichnerista Rosario Lufrano, a pedido también del exministro Fernández, ya que integrarían su circulo íntimo de confianza y militancia, según ellos mismos habrían dicho en la TV Pública. Otros funcionarios nombrados por su afinidad con el kirchnerista Frente de Todos y que quedan en altísimas funciones son Agustina Zeballos, ex productora de Víctor Hugo Morales, que fuera nombrada por Lufrano como Directora de Prensa y Relaciones Institucionales, y que se la vincula con el Instituto Patria, de Cristina Kirchner, y ahora se la designa cómo Gerente de Medios Digitales. Durante el gobierno de Alberto
Fernández fue una de las encargadas de la difusión de propaganda partidaria en TV Pública y Radio Nacional.
En la misma situación están otros nombrados por Rosario Lufrano, por afinidad política, cómo Marisa Rosano, Emanuel Ramallo, Agustin Bianchi, Gladys Martínez, Silvina Arancibia y muchos más.
Muchas voces críticas en Radio Nacional y TV Pública opinan que en vez de hacer el ajuste sobre la casta de funcionarios nombrados por el gobierno de Alberto Fernández, se haría
sobre gente de planta permanente que tiene mucha antigüedad y no ingreso por cuestiones políticas.
Mientras tanto contradictoriamente, según las fuentes, el Gobierno dice que todas esa medidas buscan “reducir el presupuesto” y “bajar el déficit” heredado de la gestión de
Rosario Lufrano, que en 2023 se había disparado por encima de los $ 20.000 millones. Pero la reducción de gastos y personal lo harían gente que colaboró desde puestos directivos en ese aumento.
Luego de la renuncia de seis altos funcionarios nombrados por los libertarios en los Medios Públicos, el final es incierto.
Mientras tanto en la TV Pública la intervención decidió una “pantalla fría”, es decir prácticamente sin programas en vivo y con repeticiones de películas, series, eventos deportivos y musicales, ya emitidos con anterioridad.