En medio del recrudecimiento de violaciones sistemáticas a los derechos humanos, así como el cierre total de todo espacio físico para ejercer el derecho a la protesta y la criminalización de todas las formas de expresión de disidencia en Cuba, Amnistía Internacional resolvió declarar ´Presos de Conciencia’ a cuatro figuras de reconocida lucha contra el régimen gobernante en la isla caribeña que en todos los casos se encuentran privados de su libertad por decisión del gobierno dictatorial de ese país.
El prestigioso diario Corriere della Sera, en un artículo que lleva la firma del periodista Riccardo Noury, revelo que Amnistía Internacional ha declarado ´presos de conciencia’ y reclamado la liberación inmediata del dirigente político disidente, Félix Navarro; de la periodista independiente, Sayli Navarro; de Roberto Pérez, quien fue detenido durante la manifestación contra el régimen cubano el 11 de julio de 2021 y del activista, Luis Robles, quien se hallan detenidos.
“Estas designaciones son un reconocimiento para las decenas de personas que se encuentran encarceladas en Cuba por ejercer pacíficamente sus derechos y para todas aquellas que viven bajo vigilancia constante, intimidación y amenaza de persecución judicial. Son también un reconocimiento a la valentía y resistencia de quienes se oponen a la represión constante y generalizada y luchan por sus derechos y los de todas las personas”, declaró Ana Piquer, directora del Programa Regional para América de Amnistía Internacional.
Félix Navarro, de 71 años, es el fundador del Partido por la Democracia ‘Pedro Luís Boitel’ y durante más de 30 años ha sido coordinador de la Unión Patriótica de Cuba y ha colaborado con la plataforma ‘Cuba Decide’ y el Consejo para una Transición Democrática en la Isla. Se halla desde hace tres años en prisión por motivos políticos. Ya había sido encarcelado en 1992 al imputársele la figura de propaganda enemiga por pegar carteles antirrevolucionarios en su ciudad natal. En 2003, durante la campaña represiva conocida como Primavera Negra, había sido condenado a 25 años en un grupo de 75 periodistas, disidentes y activistas. En aquella ocasión, Amnistía Internacional lo había declarado preso de conciencia. Quedó en libertad el 23 de marzo de 2011, siendo el último de los 75 presos en ser liberado tras haber rechazado previamente un canje de libertad por exilio.
Sayli Navarro, de 38 años, hija de Félix Navarro, es activista y cofundadora de las Damas de Blanco, un grupo de esposas, madres e hijas de los 75 detenidos durante la llamada Primavera Negra. Desde niña ha sufrido las consecuencias de la represión estatal contra su padre. En 2010 fue expulsada de la universidad al acusársele de mantener vínculos contrarrevolucionarios. Luego, fue detenida, interrogada y amenazada en repetidas ocasiones por las fuerzas de seguridad y policiales cubanas. En marzo de 2022, Félix y Sayli Navarro fueron condenados a nueve y ocho años de prisión, respectivamente, por las protestas del 11 y 12 de julio de 2021. Fueron detenidos el 12 de julio en la comisaría de Perico, adonde habían acudido para preguntar por las personas detenidas en las manifestaciones del día anterior.
Pérez, de 41 años, cumple una condena de 10 años de prisión dictada en octubre de 2021 por su participación en las protestas del 11 de julio de ese año. Fue declarado culpable de desacato, agresión, desórdenes públicos e incitación a cometer un delito, figuras a las que suelen apelar las autoridades cubanas contra quienes ejercen su derecho a la protesta pacífica.
En tanto, Robles, de 32 años, fue condenado en 2022 a cuatro años y seis meses al ser imputado por desarrollar propaganda enemiga y actuar en desobediencia, por haber caminado en diciembre de 2020 en círculo por una calle peatonal de la capital, La Habana, con un cartel en el que se leía ‘Libertad’, ‘No más represión’ y ‘#FreeDenis’, mientras decenas de personas filmaban la protesta. A los pocos minutos llegó la policía y detuvo a Robles, quien no opuso resistencia. Robles había querido solidarizarse con el rapero encarcelado Denis Solís y con el Movimiento San Isidro que exige su liberación, algunos de cuyos miembros están en huelga de hambre.
La represión de las autoridades cubanas contra activistas, defensores de los derechos humanos, periodistas, medios de comunicación independiente e intelectuales se ha intensificado en las últimas semanas. Han aumentado los malos tratos, la intimidación, las detenciones arbitrarias, las amenazas de persecución judicial y la denegación de beneficios a los presos. También se ha denunciado un preocupante deterioro de su salud física y psicológica.
Los medios de comunicación independientes El Toque, Periodismo de Barrio y Cubanet informaron que sus colaboradores fueron citados en repetidas ocasiones por las fuerzas de seguridad así como amenazados con posibles investigaciones por considerar sus actuaciones como actividades mercenarias o atribuírseles vínculos con personas o grupos considerados contrarrevolucionarios. Amnistía Internacional tuvo acceso a los testimonios de 20 activistas que fueron amenazados con ser encarcelados, obligados a grabar y firmar declaraciones autoinculpatorias y privados de sus teléfonos móviles y ordenadores.
A su vez, organizaciones de derechos humanos cubanas informaron que al menos tres colaboradores de medios de comunicación independientes fueron obligados a publicar en sus plataformas sociales cartas de renuncia y promesas de no seguir colaborando. El 16 de septiembre, la revista cultural PM Magazine anunció su cierre definitivo debido a las crecientes presiones e intimidaciones recibidas por parte de las autoridades.