Con un mensaje por cadena nacional, el presidente Alberto Fernández salió hoy a defender su gestión y aseguró que le deja más de un billón de pesos en la caja a su sucesor, Javier Milei, a quien criticó por impulsar un “ajuste”.
No obstante, Fernández admitió que su gobierno no alcanzó los objetivos que se propuso.
“El año entrante ingresarán, producto de nuestras exportaciones agrícolas y ganaderas, de nuestras exportaciones de gas y de litio, alrededor de 35.000 millones de dólares. Además, gracias al gasoducto que construimos, dejaremos de gastar 5.000 millones de dólares para importar gas licuado. De aquí hasta el 2030 las estimaciones marcan que las exportaciones sumadas de bienes y servicios crecerán el 80%”, dijo Fernández.
Y advirtió que “con semejante escenario no es razonable pensar en un ajuste que detenga nuestra producción y restrinja el empleo y el consumo que tanto nos ha costado recuperar. Debemos cuidar que bajo el argumento de querer resolver el problema fiscal, no se vulneren los derechos de los que trabajan ni se frustren las aspiraciones de los que invierten y producen”.