Cancillería advirtió sobre cualquier acción que ponga en peligro a los diplomáticos argentinos o a cualquiera de los seis asilados políticos venezolanos que se encuentran allí.
Agentes de inteligencia de la dictadura chavista persisten en su acoso contra la residencia del embajador argentino en Caracas.
Poco después del mediodía Pedro Urruchurtu, uno de los seis colaboradores de María Corina Machado que permanecen asilados, denunció que la dictadura cortaron el suministro eléctrico de la residencia, mientras que otros tomaron fotografías de los accesos a la casa.
“Hacemos responsable al régimen del asedio a este sede diplomática, violando el derecho internacional y la convención de Caracas sobre asilo diplomático y de cualquier cosa que pueda ocurrirnos aquí”, alertó Urruchurtu en X.
Cancillería, minutos después, advirtió que habrá consecuencias si la misión argentina o la residencia, que es territorio argentino, sufre algún ataque.
“Al respecto [Cancillería] advierte al gobierno de Venezuela sobre cualquier acción deliberada que ponga en peligro la seguridad del personal diplomático argentino y de los ciudadanos venezolanos bajo protección, recordando la obligación del Estado receptor de salvaguardar las instalaciones de la misión diplomática contra intrusiones o daños y preservar la tranquilidad y dignidad de la misma”.
En el mismo texto exhortaron a la comunidad internacional en general a mantenerse atentos a los acontecimientos.
Maduro dio 72 horas al personal diplomático argentino para salir de Venezuela. Corren desde el lunes. En Buenos Aires cerró la embajada venezolana, que ya desalojó también a su personal.
