jueves 28 de marzo de 2024
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Rendición de cuentas

Cuando dejaba su cargo, todo funcionario –desde Virrey hasta alcalde- debía someterse a un “juicio de residencia”. Por las faltas leves, se lo castigaba con multa; por las graves, con inhibición: no podría ejercer ningún cargo público por el resto de su vida. Así era en tiempos de la colonia.
El “juicio de residencia” era una sabia institución, con un grave defecto: el “juez de residencia” era el sucesor del funcionario juzgado. Éste se exponía así a la injusticia.
Lo importante, en todo caso, era la obligación de rendir cuentas. Al igual que otros, cada vez que dejé un cargo divulgué un informe de lo hecho. Ésta será la última vez que lo haga. Mi vida pública finalizará este 9 de diciembre, cuando deje de ser embajador ante la UNESCO: un cargo con el que me distinguió el Presidente Mauricio Macri.
Ese organismo de las Naciones Unidas está consagrado a la educación, la ciencia y la cultura. Mis mayores esfuerzos estuvieron dirigidos a la educación. Gracias a un magnífico equipo pude hacer contribuciones a la política educacional y científica de la Argentina. Antes de eso tuve, apenas llegado a la UNESCO, la oportunidad de obtener documentos sobre la violación de derechos humanos en tiempos del autoproclamado Proceso de Reconstrucción Nacional (1976-1983).
Expedientes secretos
Durante ese gobierno de facto hubo, ante la UNESCO, numerosas denuncias por la desaparición de educadores y científicos. La organización abría en cada caso un expediente y pedía explicaciones el embajador argentino de la época.
Esos expedientes quedaron reservados y hasta 2016 nadie había tenido acceso a ellos.
Cuando presenté cartas credenciales, aquel año, le pedí a la Directora General de entonces, Irina Bokova, que levantara el secreto y nos entregara esos expedientes. Ella accedió y así tuvimos, en la Delegación argentina, un registro de denuncias conmovedoras y pruebas de las imposturas del embajador argentino, el filósofo Víctor Massuh.
Está en curso una transcripción de esos expedientes para “colgarlos” en la Web.
Educación
Historias de éxito. En todas las evaluaciones internacionales sobre calidad de educación (PISA, TIMMS y otras) los países del Lejano Oriente han desplazado a los nórdicos. Estaban muy abajo en las tablas y ahora las lideran. En la cúspide aparecen países como Singapur, China (por Shangai), Japón y Corea del Sur. De los nórdicos, Finlandia es el único que se mantiene entre los diez primeros, y en los últimos años ha interrumpido un país báltico: Estonia.
Todos esos países enviaron expertos a un seminario de dos días que la Delegación argentina organizó en la UNESCO. Se llamó “Historias de éxito” y no hubo en él discursos; sólo preguntas y respuestas. Apelando a sus respectivas experiencias, se los indagó sobre métodos, prácticas, resultados y efectos secundarios. Se les preguntó, por ejemplo, cuántas materias (y cuáles) debe incluir la curricula de los sucesivos años. O si las clases deben tener la misma duración que el “lapso de atención” promedio de cada edad. O qué relación hay entre el salario de los maestros y la calidad de la enseñanza. O cuán aptos son los exámenes para medir conocimientos.
El seminario fue inaugurado por la Directora General de la UNESCO, Audrey Azoulay, y el Ministro de Educación argentino, Alejandro Finocchiaro. Cooperaron con la organización su Ministerio, el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos y la Universidad Siglo 21.
Educación e inteligencia artificial
En este seminario participaron también expertos de Singapur, China y Corea, junto con otros de Francia y la propia UNESCO. Por un lado, se analizaron los beneficios de la inteligencia artificial en el desarrollo de la capacidad cognitiva y la expansión cultural. Por otro, se señalaron los peligros de la relación aislada, alumno-máquina, en desmedro de la socialización. En las conclusiones total coincidencia: el uso de la inteligencia artificial en las escuelas debe objeto de una regulación temprana.
Rutas sanmartinianas, patrimonio de la Humanidad
Luego de año y medio de trabajo –durante el cual acumulamos innumerables datos históricos, políticos, geográficos, geológicos, arqueológicos y culturales– postulamos la inscripción de las Rutas Sanmartinianas en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO (también llamada Patrimonio de la Humanidad).
Ahora las reglas de la UNESCO requieren que, al menos durante un año, se confeccione un expediente con pruebas y eventuales ampliaciones. Para cooperar en eso logramos formar una Comisión del más alto nivel, gracias a la generosa disposición de sus titulares:
• Academia Nacional de la Historia
• Museo Histórico Nacional
• Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos.
• Instituto Nacional Sanmartiniano.
• Instituto Nacional Belgraniano.
• Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas
• Instituto Geográfico Nacional
• Comisión Nacional de Actividades Espaciales.
• Asociación Argentina de Ecología
• Academia Argentina de Letras.
• Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA)
• Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO)
• Universidad Nacional de San Juan (UNSJ)
• Universidad Nacional de La Rioja.
El proyecto tiene el auspicio del Senado y la Cámara de Diputados de la Nación, y de los gobierno de Mendoza, San Juan y La Rioja. También goza de apoyos internacionales. En España, la Universidad de Salamanca. En Francia, el Concejo Municipal de Boulogne-sur-Mer, la ciudad donde murió San Martín.
Someto todo lo hecho al “juicio de residencia”.

Publicado en Clarín el 8 de diciembre de 2019.
Link https://www.clarin.com/opinion/rodolfo-terragno-despedida-vida-publica-rendicion-cuentas_0_vHf-0Pa8.html

 

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