viernes 22 de noviembre de 2024
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Jean Louis Fabiani: “La protesta busca el reconocimiento de las instituciones para obtener derechos”

Jean Louis Fabiani, autor de La sociología tal como se escribe. De Bourdieu a Latour, publicado por la Editorial de la Universidad de San Martín, tiene la humildad de los grandes pensadores de la historia, su trayectoria internacional se relaciona con toda una vida dedicada a la academia. Tiene un Doctorado en Sociología EHESS-París, una Maestría en Filosofía en Université de Paris 1, y en el Ecole Normale Supérieure de la Sorbonne. Es profesor Senior de Central European University, profesor visitante en universidades como Yale y Columbia entre otros centros de estudio.

Desde una perspectiva multidisciplinaria Fabiani estudia la naturaleza de los movimientos sociales. Interesado por las subculturas, se dedica a indagar sobre la formación de los grandes movimientos sociales de la historia, un tema que le apasiona y al que le dedicó décadas.

En este reportaje, relata su experiencia de trabajo con personalidades de las Ciencias Sociales como Bourdieu y Althusser, los maestros que marcaron su vida profesional y con los que logró una intimidad tanto con sus ideas como a nivel personal.

Fabiani expresa: “Althusser fue mi mentor y en los últimos tiempos mi colega, cuando trabajé como profesor ayudante tuve una relación muy profunda con él. Althusser renovó el marxismo profundamente y lo convirtió en una teoría atractiva de nuevo. Fue un gran filósofo y pensador que estuvo marcado por las ideas de Marx”. El intelectual enfatiza: “Entiendo las críticas británicas hacia Marx de E. P. Thompson o Raymond Williams quien estuvo interesado menos en el marxismo teórico y más en el aspecto histórico, pero Althusser vive aún porque su teoría está vigente”.

Jean Louis se emociona cuando nombra a Bourdieu otro de sus maestros, relata: “en el libro Bourdieu, un estructuralista histórico expreso mi amor hacia él, me pongo un poco sentimental. Era una persona muy cálida, generosa, lúcida, en la última parte de su vida estaba bastante triste. El premio Nobel Günter Grass le dijo: ‘tienes que amar porque el amor es subversivo e inspira’”.

 

¿De qué manera empezaste tu trabajo en la sociología? ¿Cómo conociste a Althusser y Bourdieu?

Empecé a estudiar filosofía en Ecole en París, mis mentores fueron Althusser y Jacques Derrida. Hacia 1968 se dieron grandes movimientos sociales, quería entender estos cambios, y sentía que la filosofía no era suficiente. Entonces, Althusser invitó a Pierre Bourdieu a enseñar en un seminario que era desde las ocho hasta las diez de la noche, en Francia es la hora de la cena, por eso había muy poca concurrencia al curso.

Allí descubrí a Bourdieu y su libro Teoría de la Práctica que me sedujo porque era una propuesta ambiciosa teóricamente y pensé que era lo que quería, estudiar empíricamente, conversar con las personas, estar inmerso en la vida de la gente de distintas maneras.

 

¿Qué investigaste en relación a los temas culturales?

Estudié los diferentes aspectos de la sociedad desde la sociología de la cultura. Bourdieu se volvió famoso investigando el concepto del capital cultural, quería ir en esa dirección desde su perspectiva, entender cómo las personas se apropian de la cultura. También me influyeron otros pensadores como Michel de Certeau que provenía de una orientación jesuita, fue un antropólogo y filósofo que me admitió y me influenció en cómo pensar acerca de la creatividad de las personas, desde el concepto de bricolage.

Me distancié del concepto de dominación de Bourdieu, y me moví hacia otra dirección. Mi camino fue como el de La lección de Althusser de Jacques Rancière en los setenta. Pensé que era necesario comprender a la gente que no provenía de la academia. Trate de escapar del estructuralismo de Bourdieu para dirigirme a otra dinámica acerca de lo popular y el análisis de los procesos. Estuve durante los años noventa cerca del pensamiento de Andrew Abbott. Me alejé de los conceptos de mi mentor que me inspiraron, pero quería estar más cerca de la realidad social. Bourdieu tuvo un análisis muy acertado acerca cómo se construye la cultura. Continué desde una perspectiva multidisciplinaria, me interesé en lo público. Investigué sobre el centro Pompidou y cómo las personas se relacionan con el arte, por ejemplo, la relación entre los prisioneros y las bibliotecas de las cárceles.

En el libro que escribiste sobre Bourdieu analizas sus principales ideas. ¿Por qué pensás que Bourdieu creó un nuevo paradigma en las Ciencias Sociales?

Bourdieu es para mí un genio. Su gran paradigma es tal vez el único vigente en la actualidad en las Ciencias Sociales, con sus conceptos de capital cultural, su análisis del poder, los habitus, el rol social y la dominación. Me diferencio, sin embargo, ya que su análisis tiene dificultades para explicar los grandes cambios porque en su teoría las personas están determinadas por la estructura social y los procesos temporales. Los cambios no pueden ser explicados, esa es la principal limitación de la teoría. El mundo está fragmentado con una particular mirada.

Bourdieu renovó los conceptos, pero no pudo explicar a los movimientos sociales en la historia, para él la salvación venía desde el camino de la academia. Encontré esta visión un poco dominante como un punto de vista de la sociología. Él trato en los últimos años de cambiar su perspectiva. Es una paradoja porque era uno de los grandes críticos del intelectualismo. Él era consciente de las limitaciones de la academia, pero por otro lado, consideraba que solo la sociología podía salvar al mundo desenmascarando los mecanismos del inconsciente.  

Durante los años setenta hubo un debate entre agencia o estructura, Bourdieu fue un defensor del estructuralismo. Tuve varios críticos sobre mi posición y mi libro acerca de estas ideas. Mis críticas no son personales sino tienen una perspectiva crítica de las estructuras de dominación.

 

¿Cuáles son los conceptos o ideas que considerás relevantes para entender los movimientos sociales en la actualidad?

Los movimientos sociales son objetos de estudio muy interesantes, para entenderlos debemos comprender los conceptos de Bourdieu como el capital cultural que se relaciona con la innovación, de qué manera las personas crean un cambio. Thompson analiza de otra forma el tema, muestra que la cultura de las personas pobres también importa. Me interesa retomar conceptos como la dinámica de la performance de Charles Tilly que estudió desde adentro cómo se construyen las demandas sociales en la esfera pública.

Los movimientos sociales son formas de organización, de protesta, que tienen una manera de expresarse y producen una existencia colectiva y se manifiestan en la escena pública. Son momentos en los que se produce una existencia colectiva. Se relacionan con la conexión entre las personas más allá de su visión individual o de qué forma producimos vínculos colectivos a través de las protestas masivas.

 

¿Qué es la esfera pública, un concepto que analizás en tus publicaciones?

El análisis de Habermas no es suficiente para comprender la esfera pública. En cambio, Bourdieu pensaba en conceptos que sean perfectos para analizar a la sociedad pero la realidad es mucho más compleja a veces que los conceptos. Max Weber pensó que los conceptos tienen un contexto histórico. La esfera pública es el lugar en donde se dan y crecen las protestas colectivas de distintos grupos, por ejemplo los gays, la comunidad negra, los que reclaman reconocimientos de derechos. Cada uno reclama cosas diferentes y hacen que se produzca por momentos una fragmentación social.

La protesta busca el reconocimiento de las instituciones para obtener los mismos derechos, queremos ser reconocidos por los otros. El concepto es una idea utópica, la esfera pública es donde las minorías tienen los mismos derechos que las mayorías, un espacio donde todos pueden hablar de manera igualitaria con los demás, uso este concepto de esta manera porque soy un demócrata.

¿Cuál es el rol de los medios de comunicación en relación a los movimientos sociales?

Los medios de comunicación son cruciales para los movimientos sociales, cubren las protestas como por ejemplo la de Martin Luther King y provocan la movilización en masas. La esfera pública es en los medios de comunicación también.

Pero no hay que ser ingenuos, los medios de comunicación dominantes no dan lugar a los movimientos que a veces empiezan en pequeñas acciones, como por ejemplo Rosa Parks con sus protestas individuales que fueron el inicio de los reclamos por los derechos civiles. Se convirtió en algo colectivo por los medios, son cruciales en este tema. El problema es cuando son multinacionales tienen intereses particulares para no cubrir las protestas. En Francia los diarios son así, entonces tienen intereses privados.

Sin embargo, Habermas tenía razón, los medios son fundamentales para la escena pública. Los llamo los mediadores de la esfera pública porque su rol es importantísimo, crearon una nueva forma de comunicación colectiva. La mediación es en general vertical y no horizontal, tanto en los medios como en las redes sociales, aunque sin estos lugares las protestas no toman las mismas dimensiones.

¿Cómo explicas el concepto de fatiga de la democracia?

Los cambios en las ciencias sociales se preguntan sobre este tema de la apatía política, es la fatiga de la democracia. La mayoría de las personas no participan en la esfera pública porque no visualizan ningún beneficio en participar. Las teorías del free rider analizan la baja la participación individual porque los sujetos no ven beneficios en involucrarse. La democracia participativa tiene muchos límites entre los políticos y la multitud. Pero mi visión es que las protestas públicas son muy importantes para demostrar que no estamos solos y que hay una fuerza colectiva como ciudadanos, en la esfera pública. Es el lugar en donde se producen los cambios.

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