En plena cuenta regresiva para las elecciones presidenciales Maduro intensifica el acoso y las amenazas contra líderes opositores y ciudadanos comunes que se suman a actos de campaña.
Agentes de inteligencia detuvieron al jefe de seguridad de María Corina Machado, lideresa de la oposición de Venezuela. Se trata de Milciades Ávila, quien según la dirigente, forma parte de su custodia personal desde hace más de 10 años.
“Ávila me ha acompañado por todo el país y ha arriesgado su vida para defenderme”, denunció Machado en un posteo en X. “Esta madrugada fue secuestrado por el régimen y acusado de violencia de género contra unas mujeres que intentaron agredirnos en [la localidad de] La Encrucijada”.
En estos días, en plena cuenta regresiva para las elecciones presidenciales, convocadas para el 28 de julio, Machado recorre cada día distintos pueblos y ciudades junto con el candidato presidencial Edmundo González, por lo que suelen pasar cada noche en un lugar diferente.
Varias ONG de derechos humanos locales coinciden en que Ávila es víctima de desaparición forzada.
Maduro mantiene detenidos a varios militantes de partidos opositores, mientras en paralelo ha dado la orden de clausurar hoteles, posadas y restaurantes donde Machado y González paran a comer o dormir. También han sido puestos presos quienes han colaborado con logística, como autos y motocicletas, o sonido para actos de campaña.
Machado, además, tiene una prohibición tácita por parte de la dictadura para viajar en avión desde hace varios años, por lo que ha tenido que ingeniárselas para llevar adelante sus recorridas.
Siguen en la embajada argentina
En la residencia del embajador argentino en Caracas permanecen varios colaboradores de Machado. Tienen carácter de asilados. La dictadura los acusó de terrorismo y asociación para delinquir. Aunque desde hace semanas desde el Palacio San Martín gestionan salvoconductos para que puedan viajar a Buenos Aires, Maduro se niega a otorgárselos.
