Los cinco asilados denunciaron que pasaron 12 días sin energía, a oscuras. La semana pasada falleció Fernando Martínez Mottola, el único que salió de la sede.
La dictadura chavista de Nicolás Maduro cedió y permitió que se instale un nuevo generador eléctrico en la residencia del embajador argentino en Caracas, donde permanecen asilados cinco colaboradores de Corina Machado.
Desde hacía 12 días estaban sin energía. La sede diplomática se mantiene bajo asedio de agentes policiales y de inteligencia, que a finales del año pasado cortaron los fusibles que daban electricidad a la casa. Únicamente contaban con el anterior generador, que está previsto para emergencias, no para uso permanente.
En un comunicado agradecieron gestiones de los gobiernos de la Argentina y Brasil.
Magalí Meda, una de las asiladas, contó a La Nación que entre sus rutinas, los asilados montan guardias durante la noche, con énfasis en la madrugada, ante el temor de una irrupción chavista.
Por la contingencia de no tener electricidad cargan sus celulares con paneles solares y se alimentan principalmente con arroz, fideos y enlatados.
Este mes cumplirán un año asilados, sin que les hayan otorgado salvoconductos para viajar a Buenos Aires.
