El dictador chavista chantajeó la semana pasada con “un baño de sangre” si es derrotado en las urnas. El fin de semana volvió a tildar de nazi a Milei.
Las elecciones del próximo domingo en Venezuela mantienen en alerta a la región. La semana previa de la contienda arrancó con comentarios en la Argentina y Brasil, sumados a los insultos que el dictador Nicolás Maduro profirió a Javier Milei.
“Me asustó esa declaración”, confesó Luiz Inázio Lula da Silva, presidente brasilero, durante una conferencia de prensa con corresponsales extranjeros en Brasilia. Se refería a la amenaza de Maduro de que habrá “un baño de sangre” y una “guerra civil” si el chavismo es derrotado democráticamente en las urnas.
“Maduro tiene que aprender que cuando uno gana se queda, y cuando pierde se va y se prepara para otras elecciones”, reforzó Lula, quien reveló que ha tenido conversaciones con el dictador de Venezuela recientemente.
Agregó, por otra parte, que la elección puede hacer que Venezuela “vuelva a la normalidad” y pueda, a su vez, reintegrarse a la comunidad internacional. Dicho de otro modo: consideró que en Caracas, cuando menos, no hay un gobierno común, como sucede en el resto de Sudamérica.
Encuestas locales dan al opositor Edmundo González Urrutia una ventaja de entre 20 y 40 puntos por encima de Maduro, lo cual, de concretarse, pondría fin a 25 años ininterrumpidos de chavismo.
Desde Argentina, el vocero presidencial, Manuel Adorni, también tuvo palabras dirigidas a la dictadura chavista.
“El respeto por los derechos humanos no depende de la buena voluntad de un presidente autoritario ni de su séquito de obsecuentes”, expresó Adorni.
Durante un mitin el domingo Maduro volvió a hablar sobre el presidente argentino, a quien periódicamente recuerda en sus alocuciones. “Yo en estos días dije y él se puso bravo, pero le dije la verdad, Milei es un malparido nazi, fascista”.
En esa misma intervención deslizó que si González Urrutia llega al poder va a replicar un ajuste como el que ejecuta el gobierno libertario.
“¿Quieren que Venezuela se convierta en el desastre social de la Argentina de Milei?”, preguntó Maduro a sus seguidores.
El dictador no mencionó que después de un cuarto de siglo Venezuela es uno de los países con mayor pobreza y uno de los éxodos más masivos en el mundo.
González Urrutia, por su parte, mantiene un discurso conciliador. Ha dicho que debe haber justicia pero no venganza, y que el país requerirá, además de reformas, del regreso de parte de los casi ocho millones de venezolanos que tuvieron que huir por la crisis política y humanitaria que se desató desde hace varios años.
La región pidió libertad para presos políticos
La Argentina, Uruguay, Paraguay, Costa Rica y Guatemala exhortaron, en una declaración conjunta, a que la dictadura de Maduro frene la persecución contra la oposición, libere a los presos políticos y respete mínimamente las elecciones presidenciales.