miércoles 15 de enero de 2025
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La crisis del PRO complica las negociaciones en extraordinarias

Las primeras reuniones para discutir la hoja de ruta para las sesiones extraordinarias no tendrían lugar hasta la semana que viene, pese a que ya se publicó en el Boletín Oficial el decreto 23/2025 con el llamado para siete proyectos de ley.
El Poder Ejecutivo es el que tiene la responsabilidad de convocar a las fuerzas políticas aliadas para tantear la red de apoyos y afinar el lápiz para evitar saltar al vacío sin red.
Los temas prioritarios de la agenda de extraordinarias son el proyecto de Fortalecimiento Electoral, que incluye la eliminación de las PASO; la ley de Ficha Limpia y los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla para la Corte Suprema, aunque estos últimos ingresarán por el Senado.
En el bloque del PRO de la Cámara de Diputados esperan con ansiedad el llamado de la Casa Rosada para conocer en mayor detalle el contenido de los proyectos y la forma en que el oficialismo pretende encarar el debate durante este verano.
“Hasta no reunirse con el Gobierno y saber la hoja de ruta no van a convocar al bloque” a debatir la estrategia a seguir, supo la Agencia Noticias Argentinas de altas fuentes de la bancada presidida por Cristian Ritondo.
El comunicado del Consejo Nacional del PRO, con duras críticas hacia el Gobierno por su “visión autoritaria” y “falta de vocación de diálogo”, provocó algunas interferencias y dejó en stand by la convocatoria de la Casa Rosada a su principal aliado.
Cuando el filoso comunicado se publicó ayer en las redes y canales institucionales del partido, Ritondo se mostró sorprendido y a disgusto, ya que no lo involucraron en la redacción del texto, pese a pertenecer al Consejo Nacional.
Ritondo no sólo no compartía el tono ni parte del contenido del comunicado, sino que además fue quien tuvo que poner la cara ante los diputados del bloque que estallaron en el chat interno con pedidos de explicaciones por la decisión de Mauricio Macri de salir -a destiempo, según ellos- a confrontar con Javier Milei.
La incomodidad de Ritondo con el pronunciamiento del presidente del PRO es mayúscula, ya que es él quien lleva el diálogo institucional en el Congreso con los principales representantes del oficialismo y del Gobierno, además de mantener una relación de confianza con Milei.
En el bloque cada vez son más los que se están diferenciando de Mauricio Macri: Silvana Giudici fue una de las que expresó abiertamente su malestar con el comunicado, pero lo de la ex titular de Enacom es un caso esperable y previsible ya que su terminal política es Patricia Bullrich, quien viene exigiéndole al ex presidente que defina si el PRO es “oficialista u opositor”.
Sí llamó más la atención que el diputado ultramacrista Fernando Iglesias saliera a marcar diferencias con su jefe político, quien había considerado “autoritario” de parte del Gobierno haber dejado afuera del temario de extraordinarias el tratamiento del Presupuesto 2025.
“En este momento en el cual todo está aún, a pesar de los buenos resultados, agarrado con alfileres, y donde ha sido claro que hay un grupo muy consistente en las dos cámaras que quieren trabar al Gobierno, romper el déficit cero, me parece una medida que no merece calificarse de autoritaria. Después cada cual puede tener su opinión”, sostuvo Iglesias en declaraciones a Radio Rivadavia.
En el Senado, el PRO también está dando testimonio de disfuncionalidad: sin ir más lejos, Luis Juez anunció que abandonará la presidencia del bloque disconforme con los intentos de intervención de Macri desde afuera.
Por eso, en Diputados, además de ser una pieza clave en el vínculo con el Gobierno, Ritondo cumple la función, en este momento puntual, de contener políticamente a quienes empiezan a renegar de la conducción de Macri a raíz de las hostilidades hacia Milei.
El tema que pondrá a prueba hasta qué punto al PRO le interesa jugar en tándem con el Gobierno tiene que ver con el proyecto de eliminación de las PASO.
Como en otros proyectos, las opiniones dentro de la fuerza amarilla están divididas; en principio, la mayoría es proclive a suspender las primarias, pero sin suprimirlas.
El problema es que el Gobierno no tiene intenciones de negociar el proyecto; las opciones disponibles serán dos: eliminar las PASO o mantenerlas, y no se presentará la opción “suspender las PASO” cuando el tema arribe al recinto.
El bloque de Ritondo deberá elegir y en la balanza deberá poner el futuro de la relación con el Gobierno.
Las fuentes consultadas de la bancada amarilla ponen reparos a la propuesta contenida en la misma ley de Fortalecimiento Electoral del Gobierno de eliminar también los debates presidenciales obligatorios.
“Nos hace ruido. En el 2015 (Daniel) Scioli no se presentó al debate contra Macri. Después en nuestro gobierno lo hicimos ley”, recordaron.
El otro tema ríspido es Ficha Limpia, pero como la diputada Silvia Lospennato fue una de las partícipes (junto a Alejandro Fargosi, Luis Petri y Gastón Marra) en la redacción de esta nueva versión tras el fracaso de la anterior, se supone que el apoyo del PRO está garantizado.
En el bloque de la UCR el panorama no es muy diferente: quieren estudiar los proyectos y saber exactamente qué pretende el Gobierno antes de fijar una postura.
Al igual que en el PRO, en la bancada liderada por Rodrigo de Loredo hay miradas disímiles, motivadas por intereses diferentes en función de las realidades locales y las pertenencias provinciales, lo que hace imposible predecir un comportamiento unívoco.
“No hay postura unificada. Yo veo a los pelucas todos votando lo que les diga ´Pato´ (Bullrich). Del otro lado tenés a algunos que no quieren suspenderla (menos eliminarla), y todo se va a terminar definiendo en estos 15 días”, graficaron en diálogo con la Agencia Noticias Argentinas altas fuentes del bloque radical.
Antes de someter a deliberación interna cada uno de los temas, los interlocutores del bloque con el Gobierno (De Loredo, Soledad Carrizo y Pamela Verasay) esperan el llamado del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, para pautar una reunión en la cual charlar de estos temas.
En el resto de la oposición no reina el espíritu de cooperación con el Gobierno, precisamente.
Por caso, Encuentro Federal dejó trascender que podría no dar quórum.
En el bloque que preside Miguel Pichetto, y que tiene otros nombres importantes como Nicolás Massot, Emilio Monzó, Oscar Agost Carreño y Margarita Stolbizer, consideran inadmisible que el Gobierno no haya incluido el proyecto de Presupuesto en el temario de extraordinarias.
Lo mismo sucede en el bloque de radicales “sin peluca” Democracia para Siempre, que preside Pablo Juliano.
En tanto, el presidente del bloque de Unión por la Patria (UxP), Germán Martínez, afirmó que “el temario es puro electoralismo, sin pensar en los problemas cotidianos de nuestro pueblo”, al tiempo que calificó de “inconcebible” la ausencia del Presupuesto.
Nada en las declaraciones del santafesino permite vislumbrar un escenario en el que el kirchnerismo le aporte quórum y votos al Gobierno.

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