Desde el sábado a la tarde hay patrulleros fuera de la residencia. Cortaron el servicio eléctrico. El chavismo no atiende reclamos diplomáticos.
Los agentes de servicios de inteligencia del dictador Nicolás Maduro cumplieron 48 horas ininterrumpidas de acoso contra la residencia del embajador argentino en Caracas. Llegaron a la tarde del sábado con patrulleros y drones, y desde entonces no se retiraron del lugar. Al momento de la edición de esta nota el servicio eléctrico sigue cortado y es difícil transmitir lo que sucede porque hay inhibidores de señal.
Dentro de la residencia, que legalmente es territorio argentino, permanecen asilados seis colaboradores de María Corina Machado, referente de la oposición, que según las únicas actas disponibles ganó las elecciones presidenciales el 28 de julio, de la mano de Edmundo González.
En ocasiones anteriores los servicios de inteligencia han acosado la residencia del embajador, pero nunca habían permanecido tanto tiempo de forma ininterrumpida.
Cancillería exigió que cese el hostigamiento y que Maduro dé los salvoconductos para que los asilados puedan viajar a Buenos Aires, como determinan convenios internacionales, entre ellos la Convención de Caracas, que precisamente el chavismo viola de manera sistemática.
La embajada y la representación diplomática de la Argentina en Venezuela está en manos de Brasil, luego de que Maduro expulsó a los cuerpos diplomáticos de Uruguay, Chile, Perú, Paraguay, Costa Rica, Panamá y República Dominicana, además de la misión argentina.