lunes 21 de julio de 2025
spot_img

Tus amigos de toda la vida se divorcian, ¿y ahora qué?

Hay amigos que vienen a darte una taza de té caliente en un día frío y nublado. Eso es lo que propone la serie “Las cuatro estaciones”, ideal para empezar a ver mañana en caso de no haber organizado una salida para festejar el Día del Amigo. Porque la serie, que sigue los pasos de tres parejas de mediana edad que se conocen desde hace muchos años, nos habla del valor de mantener los vínculos aún cuando creemos que se nos viene un tsunami.

¿Qué pasa si uno de los matrimonios decide separarse? ¿Quién de los dos integrantes de la pareja se queda con el grupo de amigos? ¿Hay que darle la bienvenida a la nueva novia de nuestro amigo? ¿Y qué hacemos con la ex esposa, que también es nuestra vieja amiga?

Preguntas que explotan en el yacimiento del tiempo vivido y habrá que responder desde el subsuelo del ánimo. Porque ya se sabe que la amistad es un deporte de equipo que se practica sobre todo en la adolescencia. Pasados los 40 o los 50 años, ese deporte empieza a convertirse en nostalgia. Aparece una especie de “recesión de la amistad”, una pérdida del músculo de las relaciones lúdicas que supimos construir en la escuela o en la universidad a base de curiosidad y espíritu de apertura. Pero después de los 50 ya no. Esa vieja fórmula de la amistad compuesta por afinidad + tiempo empieza a crujir, especialmente porque lo que falta es tiempo y ganas para conocer gente nueva. Se nos llenó el disco rígido. Y no tenemos ganas de resetear. Por eso seguimos revolviendo en el baúl de los viejos afectos.

El neurocientífico Mariano Sigman, autor del libro “Amistad”, dice que en estos momentos donde todo tiembla, la amistad se vuelve un patrimonio necesario: “Hay gente que construye un búnker porque tiene miedo de que venga una catástrofe. Armar un grupo de amigos es como armar un búnker. Te da un patrimonio, te da tierra, algo muy sólido de lo que agarrarte”.

La serie de Netflix, que gira en torno al ritual de las parejas que comparten unas minivacaciones en cada una de las cuatro estaciones del año, no intenta ser moralista ni dejar lecciones. Es una comedia inteligente que encuentra el ritmo perfecto para retratar las grietas del paso del tiempo y, a la vez, dejar una grata sensación de tributo a la amistad según pasan los años.

Porque si los amigos de tu ex siguen siendo tus amigos, es porque algo bien hiciste durante todos estos años. Y porque supiste construir un búnker a prueba de todo.

Publicado en Clarín el 20 de julio de 2025.

Link https://www.clarin.com/opinion/amigos-toda-vida-divorcian-ahora_0_b62CDens2s.html?srsltid=AfmBOorNkg8GzE1uWfUzNHgUh0kR_o9wzfN5INirvw8gmeGCR9PsPE8m

spot_img
spot_img

Veinte Manzanas

spot_img

Al Toque

Martín D'Alessandro

Politólogos y escritores: el debate público no tiene dueños

Alejandro Garvie

El deslizamiento hacia la autocracia

Alejandro Einstoss

Lo que falta en la corrección de subsidios