El Observatorio de los Estados Unidos, ubicado en Mauna Loa (Hawai), mide las emisiones acumuladas de CO2 que rodean nuestra Tierra y que permanecerán en la atmosfera por centurias. Desde que comenzaron las mediciones en 1956 se vienen registrando aumentos en estas emisiones acumuladas, resultado del hecho que desde la Revolución Industrial vienen creciendo las nuevas emisiones.
La evolución de las emanaciones del CO2, altamente contaminante de la atmosfera, causado por los combustibles fósiles y la deforestación indican que desde la Revolución Industrial la concentración de CO2 acumulada en la atmosfera creció 51 %.
Debido al ritmo de aumento de las emisiones de Co2 cruzaríamos la barrera crítica de C02 acumulado ya en la próxima década; tener en cuenta que estos gases acumulados que rodean la Tierra permanecerán por siglos y que, ahora emitimos 7 veces más CO2 que en 1950.Este año será el año más cálido que se ha registrado desde el siglo XIX, cuando la humanidad empezó a usar de forma masiva los combustibles fósiles.
Los recientes eventos climáticos en muchos países evidencian que las actividades humanas están provocando cambios en la tierra, en el océano y en la atmosfera, estos cambios entrañan repercusiones nocivas y duraderas Los últimos años han sido los más cálidos de los que se tiene constancia.
Tras dos siglos de desarrollo económico basado en las energías fósiles contaminantes, la temperatura del planeta ha subido 1,1 º C, multiplicando las sequías, las inundaciones y las tormentas
Es creciente la emisión de CO2 originadas por los combustibles fósiles, el carbón es responsable del 44 % del total de las emisiones anuales, el petróleo el 34 y el gas 22. Según la International Energy Agency si queremos consolidar una nueva matriz energética” limpia” que impida cruzar la barrera de aumento global de la temperatura de 1,5C, todos estos fósiles contaminantes deberían reducir drásticamente su producción hacia 2050, pero es importante destacar que las reducciones deberían comenzar desde ahora, de manera tal que hacia el 2030 la producción mundial de carbón debería ser un 45 % menor y las de gas y petróleo 22% menores.
Es urgente reducir las emisiones tarea que exigirá la expansión de las energías limpias, como la solar, eólica, nuclear y hidroeléctrica La tarea no será fácil por la magnitud de los intereses financieros vinculados a la explotación de las energías contaminantes, baste decir que las actuales reservas mundiales de petróleo y gas podrían durar 50 años y las de carbón más de 100.
Pero estos recursos energéticos no están distribuidos igualmente entre todas las naciones.. Apenas 5 países tienen más del 80 % de la producción de carbón (China, India, Indonesia EE.UU y Australia)., 54 por ciento del petróleo ( EE.UU, Arabia Saudita, Rusia , Canadá y Irán ) y 56 por ciento del gas (EE.UU, Rusia, Irán, China, Qatar)
Estamos viviendo el colapso climático, muchas regiones están siendo azotadas por incendios, inundaciones y temperaturas abrasadoras, Las demoras en actuar vienen aumentando los costos económicos, ambientales y sociales: de la creciente contaminación global; por eso es importante avanzar sin demoras hacia la difusión de las energías “limpias” sin emisiones contaminantes
Las Naciones Unidas convocan anualmente a casi 200 naciones para encarar la reducción de las emisiones contaminantes, pero las diferencias entre ellas son significativas ya que apenas 5originan casi el 70 por ciento del total de las emisiones (China, EE.UU, UE, India y Rusia).
Como expresa el Banco Mundial, las energías renovables son clave para la expansión de una energía verde, segura y asequible.
Las energía solar y eólica son abundantes en muchos países en desarrollo, tienen un costo competitivo y constituyen una fuente de energía confiable cuando se combinan con el almacenamiento. La energía hidroeléctrica también es un tipo de energía limpia y renovable, y una de las fuentes de electricidad más baratas para los consumidores
Los desafíos que se deben enfrentar para para lograr un acelerado avance hacia la transición a la energía limpia son grandes, Estamos frente a una creciente amenaza global que exige ser encarada mediante acciones implementadas por todos los países, en el marco de negociaciones internacionales que no sean trabadas por los intereses financieros vinculados a la explotación de energías fósiles.
Si, como hasta ahora, las emisiones de carbono continúan aumentando, mitigar la grave amenaza de los daños del cambio climático exigirá en los próximos años una des carbonización más rápida y costosa, por esa razón es importante comenzar ya.